La petrolera malaya Petronas ratificó a ministros de Javier Milei su intención de avanzar con la construcción de una planta de Gas Natural Licuado (GNL) que llevará una inversión de USD 50.000 millones, pero advirtió que antes el Congreso deberá aprobar una ley que brinde seguridad jurídica y beneficios impositivos.
Las autoridades de Petronas fueron recibidas en la Casa Rosada por el jefe de Gabinete, Nicolás Posse; el CEO y presidente de YPF, Horacio Marín; y el ministro de Economía, Luis Caputo.
En la reunión los ejecutivos de Petronas ratificaron su interés en realizar una inversión millonaria que servirá para exportar el gas de Vaca Muerta, pero ponen como condición la aprobación de una ley en el Congreso.
Sector Energético ya había adelantado que la petrolera malaya condiciona el financiamiento de la planta de GNL a la aprobación de una ley que garantice el suministro especifico de gas para licuar.
En octubre, Diputados aprobó el Régimen de Promoción al Gas Natural Licuado (GNL). El oficialismo consiguió aprobar la ley a pesar de las profundas diferencias que había planteado la coalición Juntos por el Cambio en el plenario de comisiones de Energía y Presupuesto.
En septiembre del año pasado, YPF firmó con Petronas un memorando de entendimiento para trabajar en un proyecto integrado de GNL. Se trata de una sociedad en la cual la petrolera argentina tendrá el 51% de las acciones y la malaya el 49%.
En una primera etapa, la planta de GNL demanda una inversión de 10.000 millones de dólares. Por eso, Petronas pone condiciones y exige que queden plasmadas en una ley. El texto del proyecto incluye un paquete de beneficios tributarios y le otorga a la compañía malaya la libre aplicación de hasta el 50% de las divisas obtenidas.
La demanda local de gas ronda hoy los 1,8 trillones de pies cúbicos, mientras que la proyección para 2030 es de 2,4 trillones de pies cúbicos y para 2040 se estimada una demanda de 3,6 trillones de pies cúbicos.
Por eso, la gestión anterior de YPF afirmaba que el desafío de Argentina es monetizar esas reservas de gas. “Tenemos que ver la forma de abastecer el mercado interno y los saldos exportarlos a través de GNL”, planteaba Pablo González, ex CEO de la petrolera con mayoría estatal.
La planta de GNL generaría unos USD 16.000 millones anuales de facturación en exportaciones de gas. El plan implica que, luego de un año de trabajos de ingeniería, se hagan las licitaciones correspondientes para el proyecto, que se realizará en diferentes fases.
La primera prevé la llegada de un barco, ya construido, que permitiría comenzar a exportar en el orden de los 6 millones de metros cúbicos diarios (mm3/d) a partir de 2027, mientras se avanza con las fases siguientes.
Por parte de Petronas, participaron del encuentro en la Casa Rosada el director de operaciones (COO) y vicepresidente ejecutivo del área de gas de la empresa, Adnan Zainal Abidin; el vicepresidente senior de activos de GNL, Abang Yusuf Abang Puteh; el vicepresidente de activos internacionales de upstream, Mark Fitzgerald; y el CEO de la empresa en la Argentina, Nazri Idzlan Malek.