La incertidumbre que marcó el final del 2024 en Chubut parece que se extiende al comienzo de este 2025. El mapa del convencional se reconfigura, pero todavía sufre la inestabilidad que genera la migración de equipos al shale, la baja en la producción y los coletazos que puede generar el escenario político económico.
La nueva pálida vino por parte de Halliburton. La empresa de servicios envió 290 telegramas de despidos aduciendo la imposibilidad de garantizar rentabilidad a las operaciones que lleva adelante en la Cuenca del Golfo San Jorge.
Según destaca La Mañana de Neuquén, los despidos fueron divididos entre 160 trabajadores convencionales y 130 jerárquicos. Un aspecto que preocupó a los operarios es que la base de operaciones ubicada en el barrio Industrial de Comodoro Rivadavia estaba cerrada con candados. Esto llevó al gremio de petroleros convencionales a realizar la denuncia en la Secretaría de Trabajo.
“Halliburton Argentina violenta su obligación y compromiso de paz social asumido en las actas paritarias”, sostuvo el secretario adjunto del Sindicato del Petróleo, Gas y Energías Renovables de Chubut, Carlos Gómez.
Para el dirigente gremial, los despidos son injustificados por que se solicitó que los telegramas queden sin efecto. Sin embargo, la empresa de servicio ratificó la medida tomada. En tanto, la Secretaría de Trabajo dictaría conciliación obligatoria para evitar que se ponga en juego la paz social.
En declaraciones radiales, Gómez manifestó que la actitud de Halliburton “es una falta de respeto” a la región y calificó la decisión de la compañía como “drástica y destructiva”.
El próximo paso que esperan los gremios es el despido de los trabajadores que se desempeñan en las empresas contratistas y subcontratistas de Halliburton.