Los trabajos para instalar la plataforma Fénix finalizaron exitosamente a unos 60 kilómetros de la costa de Tierra del Fuego. Así lo informó este martes el consorcio conformado por Wintershall Dea, TotalEnergies y Pan American Energy.
“La exitosa instalación de la plataforma de producción marca otro hito relevante para el desarrollo del yacimiento Fénix”, dijo Manfred Boeckmann, managing director de Wintershall Dea Argentina, y agregó que la subsidiaria del gigante petrolero alemán prevé extraer gas para el cuarto trimestre de 2024.
Los trabajos para instalar la plataforma de 4.800 toneladas se llevaron a cabo en dos fases: durante enero se instaló el jacket con cuatro pilotes y luego se trabajó en la colocación de la cubierta superior, que tiene un peso de 1.500 toneladas.
En la instalación de ambas partes de la plataforma ‑en aguas de 70 metros de profundidad- participaron cuatro buques dirigidos por el buque de elevación pesada Aegir de Heerema. Desde Wintershall Dea informaron a través de un comunicado que todos los trabajos se completaron de forma segura y sin incidentes.
La cubierta se transportó desde el astillero Rosetti Marino en Italia hasta Tierra del Fuego a bordo del buque de transporte pesado HTV Interocean II. Cubre un área de superficie de 2.500 metros cuadrados y consta de cinco niveles: el helipuerto, la cubierta superior, la cubierta principal con los cabezales de pozo y la sala de instrumentos, y la cubierta inferior.
La plataforma está diseñada para ser operada desde tierra sin la necesidad de una tripulación permanente.
Conexión con Vega Pléyade
Con la instalación de la plataforma, la compañía concluye la segunda etapa del proyecto. Las instancias siguientes serán la conexión con el gasoducto a la plataforma Vega Pléyade ‑prevista para mediados de 2024- y la perforación de los tres pozos.
La perforación de los pozos se realizará con una plataforma de perforación jack-up que se ubicará temporalmente junto a la plataforma Fénix. La primera producción de gas está prevista para noviembre de 2024.
“Fénix representa un pilar sustancial para la ascendente producción nacional de gas y ayudará a la Argentina a satisfacer la creciente demanda y a compensar las importaciones, aportando volúmenes significativos de gas natural durante más de 15 años al suministro energético a largo plazo del país”, agregó Boeckmann.
Fénix forma parte de la concesión de producción de gas CMA‑1, la más austral del mundo, en la que Wintershall Dea y TotalEnergies (operador) poseen cada una una participación del 37,5%, mientras que Pan American Energy tiene el 25% restante.
El gas natural que se extraerá de Fénix será acondicionado con mano de obra local e inyectado al gasoducto General San Martín, abasteciendo la cadena de valor nacional hasta llegar a los puntos de consumo en los principales centros urbanos del país.
