Se trata del SY Witness que intentó acercarse a la zona de operaciones offshore donde opera el BGP Prospector.
La Prefectura Naval Argentina logró disuadir al SY Witness, un velero de Greenpeace, que intentó acercarse a la zona de operaciones de la CAN-100 donde se realizan tareas de exploración sísmica offshore a 300 kilómetros de Mar del Plata.
Según informan sitios especializados, el Witness ‑un velero oceánico con analizadores acústicos a bordo- intentó acercarse a la zona donde operan los buques BGP Prospector, Geo Service I y el remolcador Candela S. La embarcación se alejó del lugar sin mayores inconvenientes con dirección al puerto de Montevideo.
El Witness llegó a los mares argentinos en mayo de este año. Se trata de uno de los tres veleros de Greenpeace y fue construido en Sudáfrica en el año 2003 con aluminio y una importante tecnología de detección de sonidos de mamíferos marinos para evidenciar su presencia.
Tiene una quilla y un timón que se elevan, pudiendo navegar en aguas poco profundas, lugar inaccesible para los veleros de gran porte. Además, está diseñado para llevar adelante expediciones polares, navegando desde el año 2021 bajo bandera de Greenpeace.
En la zona donde se realizan las tareas de exploración no hay actividad pesquera, al menos flota argentina. Sin embargo, se detectó a la embarcación Lu Qing Yuan Yu 209, con bandera china cuya pesca objetivo es merluza y abadejo. Medios especializados en pesca destacan que la nave recorrió la zona “como espiando lo que se hacía dentro del área de prospección sísmica”.
En tanto, el BGP Prospector (contratado por Equinor y la petrolera argentina YPF) llegó a la zona CAN-100 en la primera semana de octubre para arrancar distintas tareas que incluyen la exploración sísmica que podrían concluir en el hallazgo de importantes reservas de hidrocarburos.
En Mar del Plata entienden que la perforación del primer pozo de hidrocarburos offshore en la Cuenca Norte del Mar Argentino abrirá la oportunidad de generar inversiones por USD 40.000 millones en componentes nacionales y la contratación de 125.000 trabajadores para el sector durante las próximas tres décadas.
