Energía Argentina aprobó hoy el llamado a licitación para la provisión de más de quinientos kilómetros de tubos que unirán Salliqueló, provincia de Buenos Aires, con San Jerónimo en Santa Fe. Siat Tenaris, señalan en el sector, sería la compañía que tiene más chances de adjudicarse el tramo.
La estatal Energía Argentina (ex Enarsa) aprobó el llamado a licitación para el suministro de caños de la segunda etapa del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (GPNK). Lo hizo hoy y las empresas interesadas deberán incluir una propuesta de financiamiento a contramano de la etapa I que contó con fondeo estatal.
La segunda etapa del GPNK se extenderá a lo largo de 524 kilómetros, unirá Salliqueló en el sur de la provincia de Buenos Aires con la localidad santafesina de San Jerónimo.
Las empresas que finalmente participen en la licitación deberán prever una propuesta de financiamiento, según precisó la ex Enarsa en su página web. Una diferencia fundamental con lo que ocurrió para el Tramo I: fondeado por el Estado nacional.
El ministro de Economía, Sergio Massa, a fines de agosto mantuvo un encuentro con el presidente brasileño, Lula Da Silva, en el que acordaron que el banco Nacional de Desarrollo de Brasil (Bndes) financiará a la empresa Techint para la segunda etapa del GPNK.
Techint y el financiamiento brasilero
Tras esa reunión trascendió que el monto de financiamiento previsto sería de alrededor de USD 400 millones, a 10 años de plazo. Lo que permitiría a Siat Tenaris, subsidiaria de la multinacional de origen Italo-argentino Techint, participar de la licitación internacional para la compra de la chapa necesaria para la producción de los tubos de 36 pulgadas que se emplearán para el tendido del gasoducto.
Según fuentes del sector, en mayo de 2023 la compañía Power China había manifestado interés en participar de la licitación. Al igual que una empresa saudí con financiamiento del Eximbank.
El financiamiento brasileño para que se complete la obra se explica por el interés de poder contar en el futuro con el gas de Vaca Muerta para los cordones industriales de las ciudades del sur brasileño.
La licitación
Las empresas deberán asegurar la provisión de tubos de acero con costura de 36 pulgadas de espesor, 12 metros de largo y unos 5.000 kilos de peso cada uno. Son similares a los que se utilizaron en la Etapa I. Tramo cuya licitación ganó Siat Tenaris, por unos USD 500 millones.
Para esta nueva etapa se estima que serán necesarios más de 43.000 tubos, lo que demandará unos 8.600 viajes en camión hasta los distintos puntos de acopio y los frentes de obra que se divida la construcción.
El presidente de la firma estatal, Agustín Gerez, destacó que “este nuevo desafío, impulsado por Sergio Massa, permite cerrar el círculo virtuoso que se inició con la primera etapa de este proyecto”.
El funcionario agregó que “con la segunda etapa del GPNK y con la Reversión del Gasoducto Norte, que iniciará su operación en abril de 2024, vamos a ahorrar más de 7.500 millones de dólares de importaciones de energía e incluso tendremos saldos exportables de gas por más de 1.000 millones de dólares por año”.
La obra está llamada a completar el proyecto del gasoducto que parte desde la Cuenca Neuquina para incrementar la evacuación del gas no convencional que puede producir Vaca Muerta, con una capacidad total de 39 millones de metros cúbicos diarios (MMm3/d) lo que significa un 25 por ciento adicional del total del sistema.
Su concreción permitirá abastecer con gas natural a todas las localidades productivas que se encuentran en cercanías de la traza y que hoy lo hacen con gas licuado de petróleo, encareciendo sus procesos y los bienes finales que comercializan.